Estos dos preciosos gatos macho de aprox. 2 años aparecieron un buen día al lado de un contenedor de basura. Gracias a que alguien se diera cuenta están hoy en una casa de acogida.
Se recogieron con una cara de miedo impresionante. ¡Es tan difícil para los gatos y para cualquiera asumir un abandono! Les hemos dado un tiempo para asimilarlo, conocernos y volver a sentirse arropados y queridos. Queremos darle las gracias especialmente a su casa de acogida por cuidarlos y mimarlos. Si algún día te planteas en acoger un gato o dos, por favor, contáctanos, las casas de acogida salvan vidas y son super importantes.
Sam y Tom siempre juntos y son inseparables. Ya es durísimo lo que han tenido que vivir que se nos partiría el alma separarlos ahora.
No sabemos nada más de su pasado.